miércoles, 9 de agosto de 2017

"Final Fantasy XV: Monster of the Deep": de un shooter con Prompto a un simulador de pesca





La última noticia sobre el título para realidad virtual de PlayStation 4 nos augura mucho más que un simulador de pesca con Final Fantasy XV: Monster of the Deep, pero lo cierto es que lo único novedoso con respecto a lo que vimos anunciado en el pasado E3 2017 es nada, absolutamente nada; te dicen que, además de pescar, podrás enfrentarte a jefes, pero esos jefes siguen siendo peces, de ingente tamaño, con unos dientes que asustan y capaces de restarle vitalidad al pescador, pero peces al fin y al cabo, seguimos con la pesca.

El año pasado, cuando en el E3 2016 presentaron por primera vez Final Fantasy XV VR Experience, nos prometieron jugar en la piel de Prompto en un FPS (First Person Shooter), quien llevaba puestas las gafas de realidad virtual, y manejarlo para enfrentarnos a un Bégimo junto a nuestros compañeros Noctis, Ignis y Gladio ejecutando un lux ímpetus o lux itineris como el príncipe de Lucis, además de poder ligotear con Cindy mientras ella conduce el Regalia.

Ésta fue la idea original del estudio nipón; en dicho evento Hajime Tabata contó que Sony metió mano para forzar que Square Enix trabajase en un título para las gafas VR, y aunque el equipo se mostró en un principio reacio, al final acabaron aceptando y lo planificaron para lanzarlo tras la salida del juego principal, a diferencia del anime Brotherhood o la película Kingsglaive, que salieron antes que Final Fantasy XV. Así Square Enix desarrolló por primera vez un videojuego de realidad virtual, y una vez se decidió lanzarlo después del videojuego principal quisieron reservar para las gafas VR los momentos pasivos del juego, pero rechazaron la idea porque daría lugar a llevar puestas las gafas durante varias horas. Tras la demo Episodio Duscae tomaron a Prompto como protagonista para darle algo más de relevancia en la historia, puesto que tras la recepción de la demo éste parecía no haber calado entre los usuarios que probaron el juego. Pero de nuevo rechazaron esta idea por considerar que este modo de juego no ofrecería  “una experiencia de inmersión ni sería suficientemente entretenido”, además de conllevar un largo periodo de desarrollo, según contó el director del videojuego de realidad virtual, Masashi Takizawa, por lo que el protagonismo de Prompto pasaría por la fotografía y, posteriormente, por su episodio independiente homónimo, Episode Prompto. De esta manera concluyeron que un simulador de pesca sí que ofrecería ambos objetivos, a saber, inmersión y diversión, por lo que rehicieron desde el principio el título. Según cuenta el diseñador principal de Monster of the Deep, Wan Hazmar, el equipo viajó a la bahía de Yokohama acompañados de Kazuaki Iwasawi, supervisor de personajes en Kingsglaive, por su experiencia con la pesca, de manera que el equipo aprovechó este viaje para plasmar estas vivencias en el juego.

Visto así parece que es un videojuego que merece la pena por la historia que hay detrás, pero cuando yo vi este anuncio en la conferencia de Sony en el pasado E3 2017, que ya de por sí fue aburridísima y repetitiva (me pareció estar viendo la conferencia del año anterior), pensé que se trataba de una broma, pero me pareció más un insulto darme cuenta de que iban en serio y que cambiaron el FPS con Prompto por más maldita pesca, como si no fuera suficiente con todos los peces que metieron ya de por sí con la primera actualización del juego (hay cien en total); no, había que meter todavía más pesca. 

Así que ya veis, el proyecto para jugar Final Fantasy XV con las gafas de realidad virtual empezó bien, añadiendo más historia al juego principal, pero se rechazó porque conllevaría llevar puestas las gafas VR durante muchas horas; luego nos pondríamos en la piel de Prompto en modo FPS luchando contra bégimos e interactuando con los chocobros y con Cindy, pero se rechazó porque no lo consideraban inmersivo ni divertido, aparte de llevarles mucho tiempo para desarrollarlo; y terminamos por tener un simulador de pesca, lo cual sí que consideran mucho más adecuado y entretenido que las ideas anteriores... Sí, sí, muy inmersiva la pesca, sí, inmersión en el agua si acaso, y muy divertido, sí, genial, más pesca, lo que todos estábamos pidiendo a gritos... (léase en modo sarcástico).

Por otra parte, el juego ya no será un DLC dependiente del juego principal, sino un standalone, es decir, no será necesario estar en posesión de Final Fantasy XV para poder jugarlo, pero teniendo en cuenta lo que cuesta la consola (PlayStation 4 Pro), las gafas VR y el juego en sí tiene que haberte tocado la lotería y no saber qué hacer con el dinero para terminar gastándolo en un simulador de pesca que, por otro lado, pinta aburridísimo.

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