Tras una pseudo primera toma de contacto con la demo de Final
Fantasy VII Remake, y digo “pseudo” porque la primera vez fue en la pasada
MGW, quedé muy satisfecha con lo que había visto, jugado y disfrutado. Sin embargo,
mientras preparaba el vídeo con el gameplay para subirlo al canal me di
cuenta de que podía haber jugado mucho mejor, ya que, por ejemplo, apenas utilicé las barras
BTC, y se me notaba muy nerviosa, y tras ver esto sentí algo de rabia al no haber
podido saborear cada uno de los ataques de Cloud y de Barret en las diferentes
batallas, tanto aleatorias como de jefes (o, mejor dicho, el jefe, el Escorpión
Centinela), puede que fuera fruto de la emoción que estaba sintiendo en ese momento por jugar a este
título tan esperado como es Final Fantasy VII Remake, tal vez por el
cansancio y la fatiga que llevaba en el cuerpo por el duro día que había tenido
junto con el malestar en la garganta que me hacía desconcentrarme, o puede que
fuera una mezcla de ambas razones.
Sea por lo que fuere, el caso es que ya no me sentí tan satisfecha
tras haberlo jugado así, de modo que anoche mismo volví a retomar el juego y lo
experimenté más tranquilamente, cansada igualmente y con las mismas molestias
en la garganta, pero ya sin la presión de estar grabándome para el canal,
pudiéndome recrear en cada rincón, leyendo detenidamente cada uno de los
tutoriales (tanto los mostrados durante el gameplay como los sólo
accesibles desde el menú), y haciendo todo tipo de pruebas… Ahí sí que pude
saborear todo lo que nos ofrece esta demo, y he de decir que me dejé muchísimas
cosas en el tintero durante la primera partida, como atajos, curaciones, cofres
no descubiertos, medallas de moguris coleccionables, textos narrativos que
contextualizan al jugador, alguna que otra escena que cambia ligeramente según
las opciones, diálogos que no había podido leer…
En fin, que en las siguientes partidas que jugué, y en sus
distintas modalidades (normal, fácil y clásico) he descubierto muchas más
cosas, me he hecho mucho más al juego y, oh sí, tengo que decirlo, se disfruta
muchísimo más ahora que me siento más adaptada al nuevo sistema de combate (quien
haya visto el vídeo de mi primera partida habrá notado que me costó acostumbrarme
a que se ataca con cuadrado y no con equis, estoy todavía muy acostumbrada a Kingdom
Hearts). Si bien el modo clásico no es el que más me convence, me quedo con
el modo normal ahora que me manejo mucho mejor que la noche del pasado lunes.
Si aún no habéis jugado a la demo, o la habéis probado, pero
a lo ligero, os invito a que echéis otra partidilla, pero de forma relajada,
sin prisas, catando cada una de las opciones que nos ofrece la demo, que no son
pocas; notaréis mucho la diferencia. Como decía, yo ya lo he jugado unas cuatro
veces y no me canso; es más, con cada partida el hype se eleva hasta
llegar a niveles estratosféricos, y seguiré jugándola y disfrutándola hasta que
llegue el ansiado diez de abril…
Dejaste cosas como las btc, etc, porque el sistema de batalla es muy simple y la dificultad de risa, yo casi lloro de nostalgia recordando mis 17 añitos, espero que en la version final le den mas caña, porque si no....sera un ffxv, aporrear 1 boton y listo. Saludos
ResponderEliminarLa verdad es que todavía se me hace raro que el botón para atacar sea cuadrado, pero bueno, ya le voy pillando el tranquillo con los atajos y por supuesto ya le doy más caña a las barras de BTC.
EliminarGracias por comentar. ^^